Por: Misión Totus Tuus.
No sé si en algún momento de tu vida has sentido la fuerte sensación de soledad. Pero, no es esa simple circunstancia en que te encuentras solo en tu habitación o en tu casa, no, es ese sentimiento que va más allá de lo físico porque incluso te sientes solo teniendo a muchas personas a tu alrededor.
No sé si en algún momento de tu vida has sentido la fuerte sensación de soledad. Pero, no es esa simple circunstancia en que te encuentras solo en tu habitación o en tu casa, no, es ese sentimiento que va más allá de lo físico porque incluso te sientes solo teniendo a muchas personas a tu alrededor.
Pero ¿qué hacer cuando sientes en tu corazón que no tienes a nadie? ¿Cómo levantar el corazón cuando no tienes motivos?
Confieso que durante mi vida he sentido muchas veces este sentimiento de soledad, he sentido ese vacio en el corazón que no se llena con nada porque en muchas ocasiones intenté llenar esa soledad con música, comida, alcohol o con malas amistades. Pero a pesar de llenar mi vida con todo eso, nunca me sentí lo suficientemente acompañado como para no sentir miedo.
Y te preguntarás ¿miedo? ¿Por qué miedo? Porque cuando te encuentras completamente solo es cuando sientes miedo o incertidumbre sobre tu vida y sobre tus sentimientos, cuando ese temor invade tu corazón es cuando te preguntas por el propósito de tu vida. Debo decirte que este tipo de experiencias las viví cuando no tenía a Jesús en mi corazón y cuando Él no está en tu vida, todo parece que es un caos.
Sin embargo, cuando conocí a Dios pude experimentar una sensación distinta. Logré permanecer físicamente solo sin sentir la ausencia, comencé a sentirme acompañado, una seguridad que nunca tenía invadió mi corazón, es como si ese vacío comenzara a llenarse poco a poco. Y no estoy hablando de una amigo imaginario sino de esa persona real que el Dios y que transforma tu vida y le da sentido.
Y una vez, estando en un grupo de oración al cual asistía el Señor me confirmó a través de su Palabra esa sensación y realidad que es su presencia, que elimina todo temor y te hace sentir parte de algo, en este caso parte de Él. Esa palabra fue la siguiente: "No tengas miedo, pues yo estoy contigo; no temas, pues yo soy tu Dios. Yo te doy fuerzas, yo te ayudo, yo te sostengo con mi mano victoriosa".
Hoy el Señor quiere decirte a través de estas cortas líneas que no estás solo, que Él te acompaña siempre, que aunque estés pasando por un momento dificil, Jesús está a tu lado. Ten la certeza en tu corazón que Dios hace presencia en cada instante de tu vida y permite que Él llene cada vacío de tu corazón.
Muchas gracias, es muy reconfortante leer esto.
ResponderEliminar